
Para perder peso hay miles de maneras, pero para lograrlo de manera definitiva sólo hay una: CAMBIAR LOS HÁBITOS Y LA CONDUCTA ALIMENTARIA. Es imposible no recuperar el peso perdido si cuando dejas la dieta vuelves a comer y a ser tan sedentario como antes.
Para que tu propósito no quede tan sólo como una buena intención fallida, sigue estas reglas que te ayudaran a cambiar tu estilo de vida y deshacerte de una vez por todas de esa "carga pesada" que asfixia a tus órganos y a tu autoestima.
- No te saltes el desayuno ni ninguna otra comida. Haz al menos 4 o 5 comidas al día.
- Mantén un registro de todo lo que comas. La gente que tiene un diario alimentario come aproximadamente un 15 % menos que aquellos que no lo tienen.
- Sé más activo. La gente sedentaria da aproximadamente unos 3000 pasos al día. Si añadieras otros 3000 pasos, esto te podría ayudar a mantener tu peso actual. Y si dieras más de 10000 pasos al día esto te permitiría perder peso. Cómprate un podómetro y conviértelo en tu mejor amigo.
- Acostúmbrate a tomar raciones más pequeñas. Sírvete la comida en platos de postre. Un plato más grande te anima a que comas más porque puedes servir más comida en él.
- Pésate una vez a la semana. Esto te permitirá detectar pequeñas ganancias de peso antes de que se descontrole y te cueste más mantenerlo a raya. No te peses más de una vez a la semana porque el peso no será fiable ya que de un día para otro podemos pesar hasta 2 kilos más porque estemos reteniendo líquidos y eso no significa que hemos engordado.
- No seas demasiado estricto. Todo el mundo tiene un antojo especial por algo y debes ser indulgente contigo mismo de vez en cuanto. Planea salir con tus amigos para comer fuera algún día y date un caprichito. MODERACIÓN ES LA CLAVE DEL ÉXITO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario